Dos personas resultaron detenidas y puestas a disposición de la Justicia en la provincia argentina de Catamarca tras el allanamiento a la vivienda desde donde operaban clandestina e ilegalmente servicios digitales a través de lo que se denomina como piratería audiovisual. Los detenidos habían creado 989 cuentas de una plataforma digital de una importante empresa de telecomunicaciones y aunque realizaron diferentes acciones para evadir los controles, los investigadores pudieron detectarlos y la Justicia los atrapó.
Los detenidos son una pareja de jóvenes con residencia en San Fernando del Valle de Catamarca. El hombre, señalado como el líder de la banda, fue imputado por el delito de “estafa continuada en calidad de coautor”. De acuerdo a la investigación, el acusado de 28 años y su pareja de 26 años no habría actuado solos para llevar adelante los hechos de piratería audiovisual. Los investigadores tienen indicios de que hay más personas involucradas y ahora se encuentran trabajando para ubicarlas.
Estas personas están acusadas de haber dado de alta con identidades usurpadas cuentas de servicios digitales de DGO, la plataforma de streaming de Directv, y de otros servicios conocidos de entretenimientos, música, juegos en línea, antivirus y paquetes informáticos, entre otros.
Para viabilizar este negocio ilegal, los acusados generaban pagos con datos de tarjetas de crédito y débito y billeteras virtuales que habían sido sustraídos a sus propietarios, según el expediente judicial. En ningún caso, confirmó la Justicia, hubo una vulneración a los sistemas de las compañías que operan las plataformas.
La lucha contra este tipo de crímenes viene creciendo con velocidad en Sudamérica, a partir de la cooperación público-privada. En julio una banda que se dedicaba a la venta y reventa de servicios ilegales de streaming digital, con unos 85.000 suscriptores, fue desbaratada en Argentina. Y a principios de agosto, dos personas fueron detenidas en Montevideo por retransmitir ilegalmente señales de televisión. En todos los casos, las causas fueron iniciadas por Directv Latin America.
El caso de Catamarca en detalle
La investigación en Catamarca se inició a partir de una alerta del equipo de Seguridad de la Información de la empresa DIRECTV, debido a comportamientos sospechosos en la creación de cuentas de su plataforma de streaming DGO.
El área que detectó las maniobras sospechosas reportó el caso al departamento de Investigaciones de Asset Protection de la compañía, que realizó una minuciosa investigación y presentó la denuncia correspondiente ante la fiscalía que finalmente intervino.
En esta etapa preliminar se lograron observar conexiones con personas de otros países y actividad con criptomonedas, por lo que no se descarta una vinculación con una red aún mucho más grande, explicaron los investigadores.
Luego de la detección del caso, las cuentas de las diversas plataformas digitales fueron canceladas y bloqueadas de inmediato sin afectar a terceros, lo que permitió evitar pérdidas millonarias para las compañías y para las personas a las que los acusados habían robado datos.
Los servicios ofrecidos, que se presumen son todos con origen ilegal, eran promocionados en redes sociales y a través de una página web en la que se daban a conocer con el nombre de “MR. MEMBRESÍAS”.
Este hecho significó un nuevo paso en la lucha del fraude audiovisual, una actividad que pone en riesgo datos sensibles de millones de personas a las que los delincuentes les roban sus datos personales en América Latina y el mundo.
Por la rapidez y el profesionalismo de la Fiscalía de Instrucción Penal de Séptima Nominación con competencia de Delitos Informáticos a cargo de Agustín Alejandro Grober, la banda con sede en Catamarca fue desbaratada.
También resultaron clave en el proceso la intervención de la División de Ciberdelito, la División de Investigaciones de la Policía de Catamarca y la gestión del estudio de abogados Iezzi & Varone en representación de los damnificados.
El Juzgado de Control de Garantías de Primera Nominación a cargo de Héctor Rodolfo Maidana ordenó el allanamiento que se llevó adelante el viernes 11 de agosto en un domicilio del barrio Parque América, en San Fernando del Valle de Catamarca.
Se secuestraron cinco teléfonos celulares con conectividad, dos de los cuales tenían líneas activas asociadas al ilícito; una computadora; dos memorias externas de almacenamiento de información; 15 tarjetas de crédito y débito; seis tarjetas SIM; 69 de cajas con números telefónicos de tarjetas SIM; un gabinete de computadora con un muy alto nivel de procesamiento y capacidad RAM que estaría valuado en alrededor de un millón de pesos.
Este tipo de venta clandestina e ilegal de plataformas y contenidos digitales a bajos precios son una tentación para los consumidores, pero no hacen más que poner en riesgo su seguridad personal y económica dado que sus datos personales caen en manos de delincuentes. Las personas que acceden a estos servicios entregan su identidad, datos de tarjetas u otra información y quedan vulnerables a las estafas bancarias o con billeteras virtuales.
El fraude audiovisual impacta de manera muy negativa en la industria, genera pérdidas millonarias para las compañías por la utilización y distribución sin autorización de contenidos protegidos por los derechos de autor, evita el cobro de impuestos necesarios para el desarrollo de las comunidades y genera la pérdida de cientos de fuentes formales de trabajo.