En la mañana de hoy tuvo lugar el acto inaugural de la 31º edición Jornadas Internacionales. El evento que, por segundo año consecutivo tiene formato online, contó con la participación de Sergio Veiga, Presidente de la Cámara de Productores y Programadores de Señales Audiovisuales (CAPPSA); Walter Burzaco, Presidente de la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC); Claudio Ambrosini, Presidente del Directorio del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM); y Horacio Rodríguez Larreta, Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
La presentación de la conferencia dse apertura estuvo a cargo de Daniel Celentano, Director Ejecutivo de ATVC, quien ofreció un saludo de bienvenida e introdujo a cada uno de los participantes.
El primer orador fue Sergio Veiga, Presidente de CAPPSA, quien definió que el gran desafío de la TV paga es mantener a los usuarios dentro de su ecosistema. Asimismo, aseguró que "es imposible analizar el mercado del contenido y la TV paga sin considerar el contexto macroeconómico y político en el que se está desarrollando" y que "a la hora de pensar en cualquier proyecto o decisión de inversión se requiere de un análisis de viabilidad para su concreción".
Por otra parte, hincapié en algunos obstáculos para el desarrollo del sector tales como las regulaciones de precios y otros factores perjudiciales como las normativas laborales muy rígidas y una carga impositiva muy alta. “Debemos evitar regulaciones como el DNU 690 que afecta a un sector en competencia y fundamental para el desarrollo del país. Un sector que afronta desafíos por las nuevas condiciones internacionales y que debe realizar inmensas inversiones para estar a la altura", puntualizó.
Luego fue el turno de Walter Burzaco, Presidente de ATVC, quien también refirió a los cambios regulatorios. "Por alguna inexplicable razón, al menos para nosotros, en medio del diálogo y el trabajo conjunto, el Gobierno dictó el DNU 690 calificando a nuestros servicios como públicos y dispuso también un congelamiento unilateral de nuestros precios. Congelamiento ajeno a la realidad de nuestros costos, inadecuado por la necesidad de continuas inversiones para expandir y mantener las redes ante el aumento de la demanda, y a contramano de la situación económica en general". En este sentido, explicó que la intención declamada por el DNU de zanjar la brecha digital o hacer universal el acceso, no se alcanza por definirlo como servicio público. "El agua, las cloacas y el gas son servicios públicos en nuestro país; no obstante, denotan carencias y una falta de cobertura notoria y verificable. Ahora bien, cuando hablamos de servicios TIC es otra cosa totalemente distintas. Según datos del INDEC, el 90% de los hogares del país cuentan con al menos una conexión a Internet, sea fija o móvil", dijo.
Sostuvo que es en esta calificación, junto al congelamiento de precios impuesto, que radica la génesis de nuevas desigualdades que aventajan a los sectores más pudientes por encima de los necesitados. "Al congelar todos los servicios, se impide que se compita en los de gama media y alta, es decir, en servicios para los sectores con mayor capacidad adquisitiva. La discusión sobre el DNU excede el marco de las consideraciones legales. Su impacto es fáctico y sus resultados lo tornan regresivo para el desarrollo de un país que precisa la inclusión digital y el ingreso a la sociedad del conocimiento, si en verdad queremos ser parte del concierto de países desarrollados. El DNU no solo afecta a un sector, también niega oportunidades a la totalidad del cuerpo social".
Burzaco tampoco ahorró críticas frente a la asimetría con la que el sector se encuentra frente a las plataformas de contenidos. "Somos un sector que invierte en dólares y cobra en pesos, que genera empleos calificados en todo el territorio, que es uno de los principales contribuyentes y que reinvierte en infraestructura de redes para beneficio del país, frente a la libertad otorgada a quienes prácticamente no generan empleos, casi no tributan en el país, cobran en dólares y no aportan inversiones. Una extraña suma cero que pasa desapercibida. Me refiero a las plataformas de contenidos y a las redes sociales. Usan las redes de nuestras empresas gratuitamente, tensionan la capacidad de estas, provocan ingentes aumentos en la demanda del ancho de banda y nos obligan a invertir constantemente para que los abonados reciban calidad. En tanto que el congelamiento, la crítica, las diatribas y la eventual queja de un usuario caen en los que tenemos congelados los precios y los costos en aumento."
Finalmente, llamó a salir de esta situación por medio del acuerdo, dejando de lado la confrontación entre el gobierno y el sector.
En su intervención el Presidente del ENACOM, Claudio Ambrosini, destacó que el Estado nunca perdió la capacidad de dialogar con todos los actores a pesar de las diferencias de los últimos tiempos. "Hemos trabajado mucho en conjunto, y sabemos que ese es el camino para encontrar soluciones de consenso. Durante la pandemia nos abocamos a garantizar la conectividad para todos los argentinos. Para ello creamos una gran cantidad de Programas destinados a los sectores vulnerables. También generamos un esquema de créditos a tasas subsidiadas para las empresas. Ahora que se vislumbra el fin de la pandemia, debemos sentarnos para analizar las complicaciones que se han generado y encontrar una solución a las diferencias".
El funcionario también destacó apostar al diálogo como única salida para enfrentar y resolver los conflictos. "Siempre que nos pidan una reunión vamos a estar, y aprovecho esta tribuna para instar a una mesa de diálogo, para plantear los problemas, del Estado, de los privados, mediante la cual lleguemos a una instancia de éxito. Es responsabilidad del Estado construir un futuro mejor", evaluó.
El útimo orador fue el Jefe de Gobierno de CABA, Horacio Rodríguez Larreta, quien resaltó el desafío más grande que tenemos en el Cono Sur es llevar conectividad de calidad a más personas y potenciar el crecimiento de todo el sector de las telecomunicaciones. "Hoy, en Argentina, la cobertura total de los servicios es cercana al 95%. Las telecomunicaciones son una industria fundamental para el desarrollo de nuestro país. La pandemia demostró la importancia de la conectividad y de contar con telecomunicaciones y contenido de calidad, sobre todo para la información, en la transmisión de certidumbre en un contexto tan duro". En ese marco, declaró: "El Estado debe fomentar la inversión y mejorar las oportunidades de los usuarios". Asimismo, explicitó que el Estado no debe intervenir en los precios.
“Hoy, en la Argentina, ya son más de 80 mil las personas cuyos ingresos dependen directamente de las telecomunicaciones, y 320 mil dependen indirectamente del sector. El potencial de generación de trabajo es enorme y está en marcha, y sabemos que puede crecer mucho más si mejoramos las condiciones para hacerlo".
Finalmente, el jefe de gobierno porteño enfatizó: "Al talento con el que contamos, debemos sumarle un Estado que entienda el mundo del Siglo XXI, que trabaje con el sector privado para invertir de manera inteligente, que no cambie arbitrariamente las reglas del juego y garantice la estabilidad a largo plazo, que no ponga parches ni límites irracionales en los precios sino que tome medidas que fomenten la inversión y mejoren las oportunidades de los usuarios, que entienda el valor que tiene la conectividad para la información, el entretenimiento y para la libertad. Solo si logramos articular el talento de nuestra gente, el empuje del sector privado y la colaboración del Estado, vamos a lograr transformar a la Argentina en una potencia regional y mundial en telecomunicaciones”, concluyó.