El valor de mercado del gaming en América Latina es de aproximadamente 10 billones de dólares, con alrededor del 8% de gamers y revenue del total mundial, según Comscore. El crecimiento del sector ha sido favorecido en parte por el desarrollo de infraestructura para conexión a internet, en particular, el incremento en la velocidad del ancho de banda.
Para las marcas y empresas, el gaming ofrece un canal dinámico y en constante evolución para la publicidad y la monetización. A partir de la selección del tipo de dispositivo o del nivel de participación en el universo gaming, las empresas tienen la posibilidad de llegar a audiencias diversas y comprometidas de maneras innovadoras y efectivas, lo que contribuye a la presencia de la marca, a mejorar su percepción y engagement con sus consumidores.
De acuerdo con los entrevistados por Comscore, más del 70% de gamers muestran disposición positiva hacia la publicidad. Cuando está bien ejecutada, la publicidad, a diferencia de otros medios, no interrumpe la experiencia del jugador, sino que la mejora (p.e. da más vidas, otorga poderes, asciende niveles) y estimula que sigan jugando.
Se estima que el tiempo promedio de juego oscila entre 2 y 4 horas diarias, con tendencia a aumentar, por lo que la exposición a estímulos publicitarios es más larga que en cualquier otro medio. La calidad de la atención también es superior, pues la mayoría de los juegos requieren concentración en la pantalla y explorar continuamente los elementos que van apareciendo.
La calidad de engagement es mayor que en otros medios audiovisuales, dado que se integra de manera natural en la vida diaria de las personas. Genera intensas emociones y sentimientos (alegría, júbilo, placer, frustración, enojo, agresividad, rivalidad) en un entorno socialmente aceptado. Acompaña por periodos prolongados sin ser intrusivo. Es combinable con otras actividades o roles del sujeto en diversos momentos o situaciones.
Por el cruce de información de las distintas fuentes relacionadas con el target, es posible un targeting preciso de nuevos perfiles digitales y la construcción de “tribus” que se reúnan en torno a intereses comunes, con un sentido de pertenencia y comunidad, lo que permite una mayor personalización y participación en sus comunidades.
En este sentido, Comscore explica que, para maximizar su impacto, las marcas deben entrar en la experiencia del usuario honestamente, procurando mejorar su experiencia de juego, sin interrumpirla, y, en ese contexto, expresar el mensaje de la marca.
Otro aspecto crucial es comprender y respetar la cultura del gamer. Las marcas deben entender las motivaciones, gustos, preferencias y actitudes del jugador en tanto que gamer, y no solo como consumidor de una categoría o producto específico. En relación a esto, el universo gaming valora la creatividad y la originalidad, invitando a las marcas a explorar nuevas formas de interactuar con los jugadores. La creación de contenido exclusivo para el gaming no solo demuestra un interés auténtico en la comunidad, sino que también permite construir una narrativa más profunda y significativa alrededor de la marca.
Finalmente, es vital que las marcas asimilen el cambio continuo del mundo del gaming. La integración de tecnologías emergentes como la realidad virtual (VR), la realidad aumentada (AR) y la inteligencia artificial (IA) está transformando la manera en que los usuarios interactúan con los contenidos digitales, ofreciendo experiencias más inmersivas y personalizadas. Adaptarse a estas tendencias emergentes es crucial para mantenerse relevante en la comunidad gamer.
El universo del gaming en América Latina no solo representa una oportunidad económica significativa, sino también un espacio vibrante y en constante evolución donde las marcas pueden establecer conexiones auténticas y duraderas con sus audiencias. Aprovechar este potencial requiere más que simplemente colocar anuncios; implica integrarse de manera genuina en la experiencia de juego, respetando las dinámicas y la cultura del gamer. A medida que el sector sigue expandiéndose y adaptándose a las nuevas tecnologías, las marcas que logren entender y acompañar esta evolución estarán mejor posicionadas para captar la atención y la lealtad de una audiencia cada vez más diversa y comprometida. Con estrategias creativas, auténticas y tecnológicamente avanzadas, el gaming se perfila como un pilar fundamental en las estrategias publicitarias del futuro.