El condicionamiento consiste principalmente en poner a disposición para su transferencia a un nuevo competidor todos los derechos de transmisión relacionados a competencias deportivas de los cuales Fox era licenciante al momento de notificación de la operación de fusión.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones decidió negarse a prorrogar el plazo de negociación, razón por la cual la misma caducó el 7 de mayo de 2021, tal como estaba previsto.
El grupo se compromete a mantener el canal en vivo hasta enero de 2022; tras ese período, Disney podrá intentar vender los derechos de la marca nuevamente.