"Spotlight Secuoya Studios: El año de la expansión global" se convirtió en uno de los encuentros más esperados de la primera jornada de la quinta edición de Iberseries & Platino Industria. El Auditorio Casa del Lector de Matadero Madrid acogió a destacados profesionales de la industria audiovisual internacional, en una cita en la que Secuoya Studios propició una conversación abierta en la que estos últimos socios compartieron su punto de vista sobre la colaboración con el estudio y el potencial de este modelo para impulsar proyectos locales con proyección global.
Durante el "Spotlight", moderado por Brendan Fitzgerald, CEO del estudio, Secuoya Studios compartió la evolución de su plan de expansión global, implementado en 2025, que ha permitido diversificar la producción y acelerar el desarrollo de proyectos sin comprometer la calidad.
Acompañando a Brendan, se encontraban Chiara Cardoso (BlackBox Multimedia, Reino Unido), Sydney Gallonde (Make it Happen Studios, Francia), Jónas Margeir (Act4, Islandia) y Chris Moukarbel (Permanent Wave Productions, Estados Unidos), quienes destacaron el valor del modelo negocio de los Pods.
Desde Londres, Chiara Cardoso (BlackBox Multimedia) recordó que la búsqueda de socios ha sido siempre parte del ADN de su compañía. "En BlackBox siempre hemos estado enfocados en encontrar los mejores partners en diferentes territorios para las coproducciones. Cuando apareció la oportunidad de colaborar con Secuoya fue la primera vez que sentimos que teníamos un socio que no solo ofrece colaboración creativa, sino también financiación y producción. Fue un sueño" subrayó.
Cardoso explicó que, gracias a esa dinámica, en 2025 arrancarán dos proyectos que aspiran a viajar y conectar con audiencias globales. A su juicio, la clave está en una comunicación clara y en la capacidad de adaptación:" El equipo entiende tus necesidades, aporta contratos, talento y guiones que pueden funcionar de la mejor manera posible", comentó. Añadió un ejemplo muy concreto: directores en España capaces de recrear paisajes británicos en el norte peninsular o las islas Canarias.
Para Sydney Gallonde (Make it Happen Studios, Francia), la alianza ha supuesto un salto cualitativo en su manera de producir: "Gracias a Secuoya no estoy solo, ahora formo parte de un negocio con el talento. Eso me permite mostrar lo que hemos hecho y lo que vamos a hacer, pero también ir más rápido, cerrar negocios más grandes y asumir proyectos más ambiciosos".
Gallonde, que ha trabajado en adaptaciones tanto francesas como internacionales, defendió que la fortaleza de un proyecto reside en su arraigo: "Para mí es muy importante que estés conectado con tu socio local. Es lo que Secuoya es, y lo que nosotros también queremos ser" comentó el productor galo.
En el caso de Islandia, la coproducción no es una opción, sino algo orgánico. Así lo expuso Jónas Margeir (Act4): "En un país de 390.000 habitantes la coproducción ocurre de manera natural. Estamos en la era de la coproducción, en la que tienes que trabajar más allá de tus fronteras para conseguir talento, acuerdos de financiación y series de calidad," destacó.
Para Margeir, la alianza con Secuoya Studios significa contar con un socio sólido que comparte valores y estándares de calidad. 'Es un pasaporte —afirmó— que nos permite alinear nuestra visión creativa con una estrategia global y llegar al objetivo con garantías," subrayó.
Chris Moukarbel (Permanent Wave Productions, EE. UU.) aportó la perspectiva del largometraje documental, un género en plena transformación. A su juicio, la línea entre el documental y la narrativa de ficción es cada vez más difusa: "El documental se ha vuelto más cinematográfico, con un nivel de producción similar al de la ficción. Colaborar con un socio con credenciales en ese espacio tiene mucho sentido', puntualizó.
El cineasta subrayó que hoy todos documentamos nuestras vidas y que internet se ha convertido en el epicentro del storytelling: "Hace 20 o 30 años solo podías acceder a la vida de alguien a través de un documental. Por eso existe el impulso de dar un tratamiento cinematográfico al documental, para diferenciarlo y darle un nivel narrativo mayor', dijo el cineasta y productor estadounidense.