De acuerdo con datos suministrado por la agencia reguladora Agência Nacional de Telecomunicações (Anatel), el mercado de la televisión paga de Brasil cerró el mes de noviembre con menos de 15 millones de abonados, algo que no había sucedido desde julio de 2012. El período registró una caída de 105 mil suscriptores, debacle que se ha consolidado en los últimos 12 meses al perder en el acumulado 1 millón de clientes.
El operador con mayor base de clientes perdidos en noviembre fue Sky, con una retracción de 58 mil clientes en el mes, cerrando el período con una base de 4,55 millones. Claro también perdió 55 mil suscriptores en noviembre, cerrando el mes con 7.05 millones de suscriptores, 6.18 millones con tecnología de cable y 870 mil con DTH.
OiTV mantuvo la tendencia de crecimiento registrada a lo largo de 2020, y amplió su base en casi 17 mil clientes en noviembre, alcanzando un total de 1,67 millones de usuarios. Es el único operador que presenta un saldo positivo de clientes durante 12 meses. La mayoría de los clientes de Oi están en DTH, pero la empresa ya tiene una base de 90 mil clientes atendidos por fibra.
Vivo se mantuvo estable en noviembre, con un pequeño crecimiento de 633 clientes, totalizando 1.255 millones de usuarios, siendo 882 mil con tecnología de fibra y 373 mil en DTH.
Los pequeños operadores tienen una base de 388 mil suscriptores. Entre ellos, el principal es Brisanet Telecomunicações con 87 mil clientes de TV paga, todos con tecnología de acceso por fibra.
Analizando el desempeño mes a mes, se observa que en noviembre hubo una importante aceleración en la pérdida base, que en el resto del año pareció estabilizarse en una pérdida de menos de 100 mil abonados mensuales. En comparación con el mejor momento de la industria, en noviembre de 2014, el mercado de la televisión de pago ya perdió 5 millones de clientes, o el 20% de su tamaño.
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