“Todo por el juego”, la ficción que refleja los claroscuros del fútbol, estrenará su segunda temporada en #0 de Movistar+ a partir del domingo 3 de noviembre. Producida por The Mediapro Studio y Directv, la serie basada en la novela “El fútbol no es así”, de Javier Tebas, Presidente de La Liga de Fútbol Profesional, y Pedro Torrens, se adentra en un clima de thriller marcado por la corrupción inmobiliaria, las intrigas políticas, las apuestas ilegales y el crimen organizado, una red de suspense que enturbia la esencia deportiva del fútbol a través de los intereses de los directivos y jugadores del Leonés, un club modesto recién ascendido a Primera División.
“Todo por el juego” es una de las series internacionales de mayor éxito de The Mediapro Studio, estrenada en América Latina por Directv y en Estados Unidos a través de la plataforma SPECTRUM Originals.
La serie vuelve a contar con la dirección Daniel Calparsoro, un experto en manejar la tensión, aquí al servicio de una trama que utiliza la ficción para retratar unos hechos que no están del todo alejados de la realidad. En un año en el que la corrupción en el fútbol ha saltado a las portadas de los periódicos, la segunda temporada de “Todo por el juego” ahonda en el daño que las mafias y las apuestas ilegales infringen a su imagen.
Aliados de Calparsoro son el equipo de guionistas liderado por Abraham Sastre y completado por Germán Aparicio, Tom Fernández y Alejo Flah. Ellos son los responsables de la creación de unos protagonistas movidos por la pasión, la codicia y la ambición, a los que dan vida Roberto Enríquez, Patricia Vico, Pedro Casablanc, Mariam Álvarez, María Molins, José Ángel Egido, Andrés Gertrudix, María de Nati y Joaquín Abad. Además, la serie no se olvida de la influencia actual del fútbol latinoamericano, con presencia de actores del otro lado del Atlántico como el mexicano Roberto Romano, que interpreta a Hugo Andrade, la nueva estrella del Leonés; y los argentinos Juan Martín Gravina, Noelia Castaño y Agustín Pardella.
En la segunda temporada, Mariano Hidalgo (Roberto Enríquez), Presidente del Leonés, logró colocar a su club en Primera División, pero su relación con la mafia rusa, mezclada con los negocios inmobiliarios, lo llevó a la ruina. Sin dejar de pensar en el bienestar de su familia, Hidalgo trata de recuperarse económicamente por medio de las comisiones que generan las apuestas ilegales.
Por su parte, Nuria Ballesteros (Patricia Vico), la ambiciosa alcaldesa de León, mueve los hilos para ascender dentro de su partido. Sin límites para utilizar a su favor todo lo que sea necesario, Nuria está sometida a una presión extraordinaria. Como consecuencia, su afición al boxeo se convierte en una peligrosa válvula de escape cuando decide participar en peleas ilegales.