LaLiga, bajo la presidencia de Javier Tebas, ha dado un giro significativo al anunciar el resultado del proceso de selección de sus nuevos socios para la producción audiovisual de la Primera y Segunda División del fútbol español, prescindiendo de los servicios de Mediapro. La compañía HBS (Host Broadcast Services) ha resultado adjudicataria de tres de los cinco bloques licitados, mientras que Telefónica Servicios Audiovisuales (TSA) se ha hecho con uno de ellos. De forma inesperada, Mediapro queda fuera por primera vez en más de dos décadas, lo que supone un cambio de etapa en la forma en la que se retransmitirá el fútbol en España. No obstante, la empresa ha anunciado su intención de impugnar legalmente la adjudicación.
El Órgano de Control de la Gestión de los Derechos Audiovisuales de LaLiga ratificó la decisión de los ejecutivos de las diferentes áreas que han participado en el proceso de selección de las compañías que llevarán a cabo la producción audiovisual de Primera y Segunda división, así como los contenidos relacionados con esas competiciones para las próximas cinco temporadas. Tras un estudio exhaustivo, LaLiga tomó la decisión de adjudicar los bloques ofertados a las compañías que han obtenido los mejores resultados en la valoración técnica y económica, de acuerdo con los criterios establecidos en el pliego de condiciones.
HBS (Host Broadcast Services) ha sido seleccionada para los tres primeros lotes, asumiendo la responsabilidad de la producción de los medios de explotación de LaLiga EA Sports y LaLiga Hypermotion, así como de los servicios de MCR y servicios centralizados. La empresa cuenta con una amplia trayectoria internacional, avalada por su papel como 'host broadcaster' en todas las ediciones de la Copa del Mundo desde 2002, así como en competiciones de primer nivel como la UEFA Champions League, la Eurocopa o la Copa Africana de Naciones.
Por su parte, Telefónica Servicios Audiovisuales (TSA) ha sido adjudicataria del cuarto lote, centrado en los servicios de contribución y distribución, gracias a su reconocida capacidad técnica en el ámbito de las comunicaciones internacionales. TSA también cuenta con una sólida experiencia en la cobertura de grandes eventos deportivos como la Champions League, la Copa del Rey o los Juegos Olímpicos.
El quinto y último lote, correspondiente a la generación de contenidos, ha quedado desierto tras el análisis de las ofertas presentadas. LaLiga ha informado que estos servicios se integrarán estratégicamente con otros contenidos que deben ser contratados de manera independiente y que no formaban parte del proceso de licitación actual.
Como si se tratase de una revisión solicitada al VAR, Mediapro expresó su rotundo desacuerdo mediante un comunicado y anunció que está evaluando la posibilidad de impugnar formalmente la adjudicación. Entre los puntos sobresalientes del escrito, Mediapro cuestionó con firmeza la decisión de LaLiga de adjudicar la producción audiovisual a otros proveedores, pese a que —según afirma— su oferta era la más ventajosa tanto económica como técnicamente. Consideró incomprensible que se haya elegido una propuesta más costosa, presentada por empresas sin medios técnicos propios en España ni experiencia comparable, incumpliendo los requisitos del concurso. Además, criticó la falta de transparencia en el proceso y desmintió las credenciales atribuidas a los adjudicatarios, señalando que muchas de las producciones mencionadas fueron realizadas por Mediapro.
La compañía también defendió su liderazgo internacional en la producción de fútbol en directo, con recursos propios, una trayectoria en 13 ligas y más de 9.000 partidos por temporada. Finalmente, recordó su papel clave en la innovación tecnológica de LaLiga y denunció que este cambio urgente y sin base objetiva podría poner en riesgo el arranque de la temporada, afectando tanto la calidad de las retransmisiones como a los clubes y a la competición.