13 JUL 2020

BRASIL: CRECE LA EXPECTATIVA POR EL TRATAMIENTO DE LOS CANALES LINEALES EN INTENET

Hay preocupación por el impacto tributario que podría tener si Anatel aprobara que la oferta de canales directo al consumidor sea considerada Servicio de Valor Adicional y no como parte de la Ley SeAC, que lo enmarca dentro del servicio de TV paga.

13 JUL 2020

Compartir
  • Facebook
  • X
  • Linkedin
  • Whatsapp

A mediados de junio, infomábamos que la Agência Nacional de Telecomunicações (Anatel) debía resolver si los productores podrían vender contenidos directo al hogar a través de Internet, por fuera de los paquetes televisivos ofrecidos por operadores en Brasil. El tema es un pendiente que Anatel tiene desde 2019 y todavía no se ha pronunciado. Sin embargo, la definición ganó un nuevo capítulo cuando el consejero Vicente Aquino abrió una solicitud de esclarecimiento al área técnica de la agencia reguladora. En una nota circular enviada a cuatro superintendencias (Competencia; Planificación reglamentaria; Control de obligaciones e Inspección), realizó una serie de consultas sobre el tema, mostrando preocupación acerca de las implicaciones económicas y políticas de la decisión que tomará Anatel.

Desde el año pasado, Anatel viene discutiendo si la oferta de canales lineales de TV por Internet debe clasificarse como TV paga (Servicio de Acceso Condicional - Ley SeAC), lo que implicaría una serie de obligaciones legales, fiscales o regulatorias; o si bien deben considerarse Servicios de Valor Agregado (SVA), lo que implicaría no estar sujeto a las regulaciones de la agencia.

El área técnica de Anatel habría llegado a la conclusión que, al menos desde el punto de vista legal, no habría impedimento alguno para ofrecer canales directamente al consumidor como un Servicio de Valor Agregado. Más que eso: Anatel reconoce que, tarde o temprano, los operadores de telecomunicaciones tendrán el derecho de buscar la alternativa de ofrecer contenido OTT, si esa opción prevaleciera en el directorio de la agencia. En definitiva, si bien todavía no hay nada confirmado, todo parecería indicar que tanto las áreas legales y técnicas de Anatel como el propio gobierno brasileño se inclinarían hacia el modelo como Servicios de Valor Agregado.

Son varias las asociaciones que piden a la Anatel que se liberen los sevicios prestados desde internet, entre ellos figuran las asociaciones brasileñas Abert, TAP, MPAA y Câmara e-Net. Todas ellas representan intereses de grupos como Globo, Warner Media, Disney, Amazon, Facebook, Apple, Google, entre otros. Algunas de estas compañías ya han expresado su preocupación a los líderes de la agencia sobre un posible retraso en completar el proceso. Telcos como Telefônica, Oi y Sky también están a favor de un tratamiento flexible para abrir la oferta de canales directos al consumidor a través de Internet. En este sentido, Disney y Warner Media ya expresaron que no llevarán sus servicios de streaming (Disney Plus y HBO Max) a Brasil hasta tanto no haya certeza del entorno regulatorio para sus inversiones. Lo mismo ocurre con Amazon, que tiene planes para expandir Prime Video en territorio brasileño.

Con una posición diametralmente opuesta están Claro, la Associação Neo y los productores de televisión independientes que piden a Anatel que sea prudente en el tratamiento regulatorio y reivindican la isonomía con el modelo tradicional de TV paga.

Entre las cuestiones planteadas por el consejo Aquino, hay dos que todavía no tienen respuesta. La primera gira en torno a la evaluación del impacto fiscal tanto a nivel estatal como municipal y federal, si es que finalmente se diera la migración de los proveedores actuales de SeAC hacia la modalidad SVA. La segunda es no menos importante: si todos los proveedores actuales de SeAC dejaran de usar redes dedicadas y migrarían a Internet porque clasificarían como SVA, quién distribuirá el contenido de los televisores públicos, educativos y comerciales.

Hay mucha expectativa y demasiados interereses en un mercado muy dinámico y con importantes desafíos para los modelos de negocio de las compañías que vienen de la mano de la transformación tecnológica de la industria audiovisual.