Como parte de una nueva propuesta a su plan de reorganización judicial, Oi ahora está considerando la posibilidad de formar una unidad productiva independiente (UPI) para empresas en recuperación judicial a través de la cual pretende vender todos los servicios de televisión paga que brinda a través de la tecnología satelital (DTH). En IPTV, en cambio, la empresa establece la obligación de compartir la mitad del revenue sharing del servicio. El valor de la operación fue declarada con un piso mínimo de R$ 20 millones, pero con compromisos.
La nueva propuesta no supone un descuento de R$ 6 mil millones respecto de la propuesta inicial. "El monto de R$ 20 mil millones no está relacionado con el patrimonio (participación social), sino con el valor económico del activo. Se estableció para permitir a los acreedores ver un monto mínimo que recibirá la empresa por vender una parte y lo que le quedará al Oi como socio de la empresa", explica Rodrigo Abreu, CEO de Oi.
El ejecutivo precisó que ese precio se basa en el promedio de las ofertas recibidas en la primera fase del proceso de venta de activos, que finalizó la semana pasada, en la que se entregaron propuestas no vinculantes. En este sentido, declaró que aspira a que "la operación reporte un valor significativamente mayor".
A través de la creación de la UPI , la nueva unidad cubriría toda la infraestructura para la prestación de servicios DTH, mediante la transferencia de activos y pasivos (incluidos los compromisos de pago de contratos adyacentes, como capacidad satelital y contratos de contenido) y la base de clientes.
Actualmente, el servicio de televisión paga de la operadora brasileña tiene alrededor de 1,48 millones de clientes, de los cuales casi su totalidad cuentan con tecnología DTH. La operación incluye el contrato con la operadora satelital SES por la explotación de la capacidad del satélite SES-6, que se extiende hasta 2028. Los ingresos de TV paga de Oi en el segundo trimestre han sido de R$ 370 millones.
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