José María Álvarez-Pallete
En un encuentro con los periodistas para presentar los resultados de 2021, el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete hizo referencia a los cambios actuales en el sector de Televisión de pago en España y a la pérdida de la posición dominante, establecida por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), ante el crecimiento de los servicios de streaming como Netflix, Disney+ o HBO en España.
La televisión de pago siempre fue un servicio "diferencial" dentro de la oferta de Telefónica. Sin embargo, la irrupción en los últimos años en este mercado de las plataformas de vídeo en streaming, provocó un enorme cambio en el panorama competitivo e hizo que el grupo de telecomunicaciones ya no sea el gran operador dominante que era antes.
Un cambio al que, según Telefónica, permanece indiferente la CNMC, ya que sigue aplicando al sector la misma regulación que hace siete años, cuando compró DTS, y que mantiene "maniatada" a la empresa a la hora de competir en el negocio de la televisión de pago.
Este entorno regulatorio "injusto" hizo que Telefónica aplazara cualquier decisión sobre el futuro Movistar+, como posibles colaboraciones y alianzas con otros actores. “Desde que Telefónica lanzó Fusión en 2012 o adquirió Canal+ en 2015 han pasado muchas cosas, ya que, por ejemplo, en aquellas fechas no existía ninguna de las plataformas de streaming que operan hoy en día”, describió Álvarez-Pallete, quien también remarcó que, aunque trabaja por mantener un contenido diferencial, “antes tenía los estrenos de los grandes estudios cinematográficos y ahora no porque todas esas 'Majors' están creando sus propios servicios de streaming.”
"Es una situación que no podemos obviar y tenemos que estudiar todos los escenarios", subrayó el ejecutivo. “Antes de definir cualquier alianza o colaboración con cualquier compañía, sea nacional o internacional, tenemos que tener claro cuál es su capacidad de competir en este mercado.” En este sentido, detalló que lo primero que se debe aclarar es cuál es el mercado de la televisión de pago en España, porque si este incluye el visionado de contenidos en un televisor o en cualquier otra pantalla, actualmente "la definición de los mercados está mal".
La actual definición de la CNMC de televisión solo tiene en cuenta los más de seis millones de clientes que tienen los servicios de las distintas operadoras y no los alrededor de más de ocho millones que se estiman tienen contratada alguna plataforma de streaming.
Por este motivo, Álvarez-Pallete argumentó que la posición de operadora dominante que otorga actualmente la CNMC a Telefónica en el negocio de la televisión de pago es irreal y, por ello, las actuales condiciones que impone al grupo en este mercado, vigentes desde la compra de DTS en 2015, no deberían seguir aplicándose. "Los remedies que nos impusieron en su momento cuando se compró la plataforma de Canal+ carecen de sentido en este momento", afirmó.
"Estamos maniatados, estamos restringidos comercialmente por una regulación que se hizo para otra época y, por lo tanto, reclamamos el derecho a que se reconsidere", sentenció. Aún así, el presidente de Telefónica dejó claro que no quieren que regulen a otras compañías, sino que desregulen a Telefónica. "Pedimos competir en igualdad de condiciones: mismos servicios, mismas reglas y mismas obligaciones".
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